
Todo esto viene –además de a la situación del otro día– a que nos ha llegado una nota de prensa del iWine by Paco & Lola, un albariño que al menos en su versión estándar me parece de lo más agradable (no he podido probar éste). La gracia del iWine, aparte de su etiqueta y de ir dirigido a "un público joven que prefiere maridar con un tema de Mika que leer unas aburridas notas de cata" (sic), es que se ha realizado una criomaceración a muy baja temperatura gracias al uso del hielo seco. Aprovechando esto, y pese a que el vino –que cuesta en tienda 25 euros– salió para las pasadas Navidades, ahora se promociona como "el sabor más helado del verano". Pues eso, 25 euros para que sepa como agua, no lo entiendo.