El otro día pude asistir gracias a la gente de SKYY Vodka a una exhibición de flairtenders en el incomparable marco del restaurante Teatriz. Y vosotros diréis: ¿qué son los flairtenders? Pues se trata de un 'palabro' que mezcla Flair ("estilo") con Bartender ("camarero") para así denominar a aquellos camareros que nos sirven cócteles con estilo. Vamos, que crecieron viendo 'Cocktail' y se les grabó a fuego la imagen de Tom Cruise haciendo virguerías mientras servía Mojitos y Caipiriñas.
Este movimiento aún no cuenta en España con los seguidores de los que disfruta en los países anglosajones, donde se organizan competiciones en numerosos locales de copas. Aún así, doce valientes participantes se atrevieron a medir sus habilidades en la primera edición del SKYY Flair Global Challenge España, con jugosos premios en metálico y, lo que es más importante, un hueco en la final de la edición internacional del certamen, que se celebrará en Shangai los próximos días 23 y 24 de octubre.
La verdad es que la competición me sorprendió agradablemente y hay que admitir que las piruetas de los flairtenders no desmerecían a las que vemos en las películas. Al final fue Nahuel Frumboli, argentino afincado en Barcelona, el ganador del pasaje a Shangai (y 1.500 euros de paso) gracias a sus piruetas y su simpatía. Y yo, aunque no pude degustar los cócteles del ganador (un privilegio reservado para el jurado), sí que pude amenizar la noche con una agradable cena y unas caipiroskas hechas con SKYY Vodka más que recomendables que, eso sí, no recomiendo ingerir antes de realizar acrobacias cocteleras.
Este movimiento aún no cuenta en España con los seguidores de los que disfruta en los países anglosajones, donde se organizan competiciones en numerosos locales de copas. Aún así, doce valientes participantes se atrevieron a medir sus habilidades en la primera edición del SKYY Flair Global Challenge España, con jugosos premios en metálico y, lo que es más importante, un hueco en la final de la edición internacional del certamen, que se celebrará en Shangai los próximos días 23 y 24 de octubre.
La verdad es que la competición me sorprendió agradablemente y hay que admitir que las piruetas de los flairtenders no desmerecían a las que vemos en las películas. Al final fue Nahuel Frumboli, argentino afincado en Barcelona, el ganador del pasaje a Shangai (y 1.500 euros de paso) gracias a sus piruetas y su simpatía. Y yo, aunque no pude degustar los cócteles del ganador (un privilegio reservado para el jurado), sí que pude amenizar la noche con una agradable cena y unas caipiroskas hechas con SKYY Vodka más que recomendables que, eso sí, no recomiendo ingerir antes de realizar acrobacias cocteleras.